viernes, 29 de marzo de 2013

Próxima estación: València - Estació del Nord

Definitivamente, la mejor forma de viajar hasta Valencia es ir en tren. La estación principal de trenes, de nombre Estació del Nord (Estación del Norte), cuyo origen está en el nombre de la empresa de ferrocarriles que la construyó (la compañia de caminos de hierro del Norte de España), es una de las joyas arquitectónicas de la ciudad, y además deja al viajero en pleno centro. La explanada que frente a su fachada primcipal, permite contemplar unas perspectivas geniales de su propia fachada y de su entorno inmediato.

En resumen, nada que ver con el paisaje urbano arisco y poco acogedor con el que se recibe a quien llega en tren a estaciones como Sants (Barcelona) o Atocha (Madrid).

Aunque con la nueva estación "provisional" Joaquin Sorolla de trenes de larga distancia la "Estació del Nord" ha quedado reservada para el uso cotidiano de los usuarios de los cercanías y los regionales, hay un autobus cada 10 min gratuito que enlaza ambas estaciones, por lo que si se llega en tren a Valencia, entrar y salir a través de esta estación es caso un deber.









sábado, 9 de marzo de 2013

BCN & MAD, las dos grandes ciudades de España

Despues de más de un año de sequía bloguera, aquí estoy escribiendo unas líneas de nuevo. Y empezaré por esta dualidad Barcelona - Madrid que tengo en mente describir desde hace tiempo. Vivo en Barcelona desde hace unos años, así que la voy conociendo más o menos bien. Y Madrid, que para mí era bastante desconocida hasta hace unos años, he tenido ocasión de visitarla con relativa frecuencia por trabajo y por placer en los últimos tiempos. Así que estoy en condiciones de poder comparar ambas ciudades, y contar como las veo.

Barcelona, como ciudad en sí, roza la perfección. Calles recién urbanizadas, ningún bordillo roto, árboles no faltan, todos los pasos de peatones bien pintados, alineaciones rectas, tráfico bien organizado, ordenanzas municipales de paisaje urbano que se cumplen a rajatabla sin carteles de comercios que se salgan ni un milímetro de la estricta normativa que los regula, etc... La vida aquí, exceptuando el centro, invadido por turistas la mayor parte del año, es la de una ciudad del norte de europa con los rasgos propios e inevitables de ciudad mediterránea, con buen tiempo, y por tanto, más sociable.

Madrid, en cambio, que es mucho más caótica como ciudad en sí, citando un buen artículo de la revista JotDown en el que se habla de estas dos ciudades, "Lo increíble de Madrid no son sus monumentos, ni sus calles, ni sus museos. Lo que tiene Madrid es el ambiente. Es irse de compras al mercado de Fuencarral. Es salir de copas un martes del mes de noviembre. Es un bocata de calamares en la Plaza Mayor. Es la plaza del Dos de Mayo. Es comer en la Latina un domingo de mayo. Es la gente.". No lo podría haber definido mejor.

Cuando hablo a mis amigos sobre esto, les digo: En Barcelona la gente está sentada en los bares, cada grupo alrededor de su mesa, tomando sus cervezas. En Madrid no hay sillas ni mesas. La gente está de pie, se mueve por el bar. Es otro rollo, nada que ver...

Ambiente de bares en el centro de Madrid

Avinguda Diagonal, Barcelona